LITERATURA: "EGIDIO, EL GRANJERO DE HAM (Farmer Giles of Ham)"

Autor: J.R.R. Tolkien
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Editorial: Círculo de Lectores

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Páginas: 96

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Argumento: Egidio es un tranquilo granjero que, por casualidad, por obra de su inquieto perro, le pega un trabucazo a un gigante que pasaba por ahí. El gigante se va.
El hecho llega a los oídos de todo el pueblo. Todos le toman, a partir de ese momento, por un héroe. Todos le admiran.

Un día, el gigante se topa con un dragón, y le dice que hace tiempo entró en un lugar donde había comida suficiente, aunque había que tener cuidado con los tábanos, que le habían picado. El dragón, como ya comienza a tener problemas con su reserva de comida, se adentra en el lugar, que es donde vive Egidio y su gente..
Como quiera que Egidio había vencido, por así decirlo, pues ni él sabe lo que hizo, al gigante, todos le piden ayuda, incluso el Rey y la Corte, para acabar con el dragón.
Egidio, que tiene más miedo que vergüenza, debe aceptar so pena de morir, así que va en busca del dragón.

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Comentario: Precioso cuento, no precisamente infantil, aunque a cualquier niño le gustaría. Pero contiene sabias reflexiones sobre diversas cuestiones importantes en la vida: el sentido del deber, el poder de la casualidad, de las promesas incumplidas, o de la mezquindad de los poderosos hacia los más humildes y necesitados.
Un libro que no llega a cien páginas pero que llena del todo gracias a una exquisita narración, en todo momento entretenidísimo y de creciente interés.
Excelentes y muy divertidos diálogos, y unas descripciones sobre la psicología, tanto humana como del dragón, propias de un maestro.

Sí, supongo que los más duchos en la obra de Tolkien, dirán que es una obrita de nada, que no se puede ni se debe comparar a, por ejemplo, "El Señor de los anillos", pero en primer lugar no se debe comparar y en segundo, nadie negará que la lectura de "Egidio..." es más digerible, simplemente por su extensión.

Merece la pena su lectura pues hace pasar muy buen rato y siempre se puede leer más de dos o tres veces. Cada vez que lo lea, el lector descubrirá algo nuevo que le reconfortará.