Director: Peter Greeneway
---
Intérpretes Principales: Elmer Bäck, Luis Alberti, Stelio Savante, Maya Zapata, Lisa Owen, Rasmus Slätis, Raino Ranta, Alan Del Castillo, Jakob Öhrman.
---
Argumento: Crónica sobre un periodo de la vida del director soviético Sergei Eisenstein, el que pasó en México, donde rodó, entre otros films, "¡Que viva México!". El director de “El Acorazado Potemkin” (1925) vivió más de un año (1931) allí para plasmar en celuloide su fascinación por el Día de Muertos y los ritos religiosos de la cultura popular mexicana.
Sin embargo, la cinta quedó inconclusa, por lo que en 1979 Grigori Aleksandrov, a partir de los “storyboards” originales de Eisenstein, compiló “¡Que Viva México!, una aproximación al montaje que éste planeaba.
---
Mi comentario: Irregular, irreverente, interesante y finalmente no muy convincente última cinta hasta la fecha del simpar, del ínclito Peter Greeneway, a quien los buenos tiempos en el mundo del cine se le acabaron, aunque con esta peli remonta un tanto el vuelo.
Sigue siendo un cineasta creativo, dueño de un modo de filmar muy personal, utilizando diversas artes creativas para plasmar "su verdad" en una historia donde realidad y leyenda se dan la mano para mostrar las intimidades de un cineasta simpar, uno de los más grandes realizadores de todos los tiempos, como fue sin duda ninguna Sergei Eisenstein, no olvidemos, creador de obras maestras absolutas, con el inmortal "El acorazado Potemkin" a la cabeza.
Aquí se le refleja como un niño grande, lleno de frustraciones personales, todavía virgen en su "presunta" verdadera sexualidad, y verborreico hasta la extenuación. Un hombre inteligentísimo, pero infatigable y fatigador de quien le rodeara.
A mí, personalmente, me ha gustado mucho su, digamos, primera mitad, aquella donde vemos cómo llega a Guanajuato, va conociendo a Palomino y la gente que le rodea, y los diálogos entre los dos protagonistas haciendo mención continua a literatos, cineastas, políticos... hablando de la vida, el sexo, la amistad, la muerte, el arte...
Quizás luego se vuelve repetitiva y un tanto cansina, fatigando al espectador al no darle tregua. Eso mi ocurrió a mí. Demasiados datos, nombres, y una escena muy polémica de sexo entre hombres, muy bien rodada, interesante por lo que se hablan mientras consuman el acto, pero en mi opinión, más larga de la cuenta, lo que hizo sin duda, que en el marco donde yo la ví, en el Cine Club de Las Arenas, Getxo, Bizkaia, más de una pareja o grupo de amigos se fuera del cine en esos minutos. En fin...
Por lo tanto, interesante, pero muy irregular. Veremos lo que nos depara Greeneway, que ha prometido o "amenazado" (según los gustos de los espectadores) que habrá dos películas más que versen sobre el inmortal cineasta ruso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario