Director: Brandon Christensen
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Intérpretes Principales: Christie Burke, Jesse Moss (1, 2), Rebecca Olson, Jenn Griffin, Sheila McCarthy, Sean Rogerson, Dylan Playfair, Praneet Akilla, Pat Chau, Grace Christensen, Michael Ironside (1, 2), Maddox Laloge, Paige Laloge, Naddine Madell, Barb.
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Argumento: Mary está embarazada de gemelos, pero, en el parto, uno de los bebés muere.
Diagnosticada con depresión postparto, la mujer entra en una espiral de neurosis, sobre todo cuando descubre las historias sobre un ente demoníaco que se alimenta de las madres y los recién nacidos.
¿Será eso lo que la atormenta por las noches, o se trata de sus terrores íntimos?
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Mi comentario: Mediocre filme de terror fantástico que tiene la indudable virtud de mantener la atención del respetable con una única historia, aunque finalmente no convenza ni guste demasiado que digamos.
Mantiene el interés más que nada por saber cómo diantres finalizará todo... que acaba irremediablemente como hacia la mitad hueles; esto es, como muchísimas cintas de parecido pelo... aunque el plano final sea realmente bueno, al resultar deliberadamente ambigüo y dejando al espectador libertad para pensar lo que quiera, aunque si nos atenemos a las reglas del género para mi gusto esté más que claro, pero...
Christie Burke, su joven protagonista se esfuerza en su por otra parte nada fácil papel, pero si quitamos la fotografía de Bradley Stuckel, excelente, nada nos aporta a lo ya trillado de este género.
A mi, debo confesar que no me suelen satisfacer esta clase de productos (muchísimas veces sub-productos, lo que no es el caso felizmente), así que quizás no sea lo más subjetivo que debiera, pero es que al finalizar la proyección tengo una molesta sensación de dèja vu y de tiempo perdido.
No, no es que aburra, se puede ver, pero francamente no me ha aportado nada nuevo, así que...
Para gustos... supongo.
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