Título original: Strays
Director: Josh Greenbaum
Guion: Dan Perrault
Fotografía: Tim Orr
Música: Dara Taylor
Género: Comedia
Reparto: Dennis Quaid, Wil Forte, Brett Gelman, Dan Perrault, Jaquita Ta'le, Charity Cervantes. Voces de: Will Ferrell, Jamie Foxx, Isla Fisher, Randall Park, Rob Riggle, Josh Gad, Sofía Vergara, Jamie Demetriou, Greta Lee, Jimmy Tatro, Harvet Guillén, Jack De Sanz
Argumento
Reggie, un border terrier ingenuo y optimista hasta la médula, acaba abandonado en las despiadadas calles de la ciudad por su dueño, Doug, aunque totalmente convencido de que todo ha sido un malentendido y que su adorado compañero de vida nunca se desentendería así de él.
Pero cuando se topa con un locuaz y malhablado boston terrier llamado Bug, un perro vagabundo que adora su libertad y que cree que lo de tener dueño es de perdedores, Reggie por fin se da cuenta de que vivía inmerso en una relación tóxica y empieza a ver a Doug como lo que de verdad es: un tiparraco despreciable y desalmado.
Decidido a vengarse, Reggie, Bug y los colegas de este -Maggie, una espabilada pastora australiana que se ha visto relegada por el nuevo cachorrito de su ama; y Hunter, un angustiado gran danés que vive estresado por su trabajo como animal de terapia emocional- se embarcan en una épica aventura para ayudar a Reggie a encontrar el camino de vuelta a casa... y hacer que Doug pague por sus actos.
Desconcertante film que no se sabe a qué público va dirigido exactamente. Me refiero a que, evidentemente, para niños es totalmente inapropiada, para jóvenes, si van acompañados pues... y para los mayores sí que pudiera tener predicamento en cuanto a situaciones que les podrían resultar graciosas.
Y es que la película tiene un punto de partida que promete mucho y así, la presentación del protagonista y su amo humano no carece de chispa, ritmo y gracia. Pero luego comienzan los diálogos soeces, llenos de connotaciones sexuales toscas y de mal gusto y no pocos momentos escatológicos que más que gracia podrían causar asco.
Sí, lo reconozco, incluso en estas últimas escenas y algunas más, aparece nuestra sonrisa y en ocasiones risas, como cuando comen setas alucinógenas, se caen de un árbol y en su primer tercio. Sin embargo, su indefinición no le favorece.
Con todo, no aburre y en líneas generales, si eres adulto, te hace pasar un rato ameno, pero no deja de ser un film en ocasiones desagradable, pero no carente de ingenio y gracejo.
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