Director: Philippe de Chauveron
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Intérpretes Principales: Christian Clavier, Chantal Lauby, Ary Abittan, Medi Sadoun, Frédéric Chau, Noom Diawara, Frédérique Bel, Julia Piaton, Émilie Caen, Élodie Fontan, Pascal Nzonzi.
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Argumento: Claude y Marie Verneuil, un matrimonio católico y muy conservador, tienen cuatro hijas, a las que han tratado de inculcar sus valores y principios.
Sin embargo, las chicas sólo les han dado disgustos: la mayor se casó con un musulmán; la segunda, con un judío, y la tercera, con un chino.
El matrimonio deposita todas sus esperanzas en la hija menor, esperando que, al menos ella, se case por la iglesia. Y así será, pero el novio...
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Mi opinión: Enorme éxito en Francia, donde la ha visto más de 12 millones de personas, aquí se tenía la duda si sería lo mismo o al menos algo parecido. Lo cierto es que sí, no es el gran bombazo, pero está haciendo bonitas recaudaciones.
La razón es que es francamente divertida, con algunos o bastantes chistes fáciles, pero también con diálogos que hacen carcajear a veces, reír un buen número de ellas y sonreír casi a cada instante.
Cierto es que es irregular, teniendo un evidente bache narrativo hacia la mitad de la cinta, cuando comienza la familia negra a tomar protagonismo, pero vuelve a subir en su tramo final y la peña se lo pasa muy bien.
Los intérpretes tienen bastante culpa, pues son estimables, sobre todo los actores y la protagonista principal, o sea, la madre del clan.
Un cine que nos puede recordar, como se ha dicho por ahí, al cine de los sesehta y setenta de Louis de Funés, pero no veo que haya nada malo en ello, bien me reía entonces cuando las veía.
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