GODZILLA VS. KONG (USA, Australia; 2021) Fantástico, Ciencia Ficción

Director: ADAM WINGARD
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Intérpretes Principales: Alexander Skarsgård, Millie Bobby Brown, Rebecca Hall, Kyle Chandler, Eiza González, Shun Oguri, Demian Bichir, Julian Dennison, Zhang Ziyi, Van Marten, Jessica Henwick, Lance Reddick, Brian Tyree Henry, Ronny Chieng, Hakeem Kae-Kazim, John Pirruccello, Chris Chalk
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Argumento: Godzilla y Kong, dos de las fuerzas más poderosas de un planeta habitado por todo tipo de aterradoras criaturas, se enfrentan en un espectacular combate que sacude los cimientos de la humanidad.
Kong y sus protectores emprenderán un peligroso viaje para encontrar su verdadero hogar. Con ellos está Jia, una joven huérfana con la que el gigante tiene un vínculo único y poderoso.
En el camino se cruzan inesperadamente con el de un Godzilla enfurecido que va causando destrucción a su paso por el mundo.
El choque épico entre los dos titanes, provocado por fuerzas invisibles, es solo el comienzo del misterio que se esconde en las profundidades del núcleo de la Tierra.
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Mi comentario: Entretenida, muy vistosa y espectacular película con los Reyes Godzilla y King Kong (aquí sólo Kong), que en anteriores filmes tanto nos hicieron disfrutar, sobre todo de chavales.
Es cierto que va de más a menos, pero en todo momento sabe Wingard, el realizador, mantener el buen ritmo y las atractivas situaciones que por otra parte devienen al final en un tramo harto previsible, pues se ve venir de lejos cuanto acontece finalmente.

 

Pero mientras tanto disfrutamos con el viaje que tanto Kong como los personajes humanos realizan, adentrándose en un mundo subterráneo lleno de misterio e imaginación.
Tiene el film excelentes escenas, como la larga pero impresionante batalla en el mar, que te dejan boquiabierto. Y otros, como el susodicho viaje a "La Tierra Hueca", lleno de colorido y plasticidad.

 

No es una obra maestra, pero sí que es en todo momento amena, aunque tengamos que soportar (tampoco es para tanto) los toques de "humor" a cargo de algún personaje humano o la penosa interpretación de Alexander Skargârd, con cara en todo momento de no creerse dónde se ha metido.
Está bien, sobre todo viéndola en cine, en pantalla grande, como debe ser.