Título original: Yo gui zi
Director: Ho Meng-Hua
Guion: Lam Chua
Música: Frankie Chan
Fotografía: Cho Wai-Kei
Género: Fantástico, Policíaco, Intriga, Acción, Erótico
Reparto: Chen Pinh, Tino Wong, Alan Chui, Hsu Hsia, Danny Lee, Wang Hsieh, Lily Li, Angela Yu, Ku Feng, Wa Lun, Chan Dik-Hak, Chiang Yang, Wong Mei, Corey Yuen
Argumento
Un hombre, su mujer y un amigo de la familia tienen una compañía de cocos y aceite, pero unos criminales les ponen en un aprieto cuando se quieren quedar con su compañía. Al hombre lo mandan a la cárcel, así que para preparar la venganza aparecerá el amigo de la familia convertido, gracias a un conjuro mágico, en un monstruo de aceite que se encargará de acabar con los criminales.
Pues una producción de "Shaw Brothers", es decir, que tiene su inconfundible sello a cine hecho con libertad creativa, sin tapujos ético-morales y pensado para que el respetable se pase un rato la mar de entretenido.
Y en efecto, esta peli así es. Une los géneros del fantástico/terrorífico, con el policíaco, el negro, la pura acción y la comedia, no en vano, en todo momento hay una sorna en todo lo expuesto, incluso en los momentos presuntamente más serios.
El argumento es inenarrable, pero creado sin prejuicio alguno y sin sentido del ridículo, como debe ser. Es un entretenimiento facilón, resultón, cachondo incluso, no en vano también tenemos escenas eróticas, sin pasarse, pero mostrando "carne", lo que se agradece de veras.
Es amena y se si entra desde el principio en la trama y se asume sus propuestas, te lo pasas bien, aunque no sea especialmente buena, si exceptuamos su maravillosa fotografía a todo color y pantalla, a cargo de Cho Wai-Kei y la belleza de todas las actrices.
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