Título original: Cinque figli di cane
Director: Alfio Caltabiano
Guion: Alfio Caltabiano, Ferdinando Baldi, José G. Maesso, Leonardo Martín
Música: Riz Ortolani
Fotografía: Francisco Fraile
Género: Negro, Acción
Reparto: George Eastman, Wayde Preston, Graziella Granata, Tano Cimarosa, Archie Savage, José Suárez, Nello Pazzafini, Antonella Murgia, Gianni Solaro, Sandro Dori, Mirella Pamphili, Porfiria Sanchíz,. Tito García, Goyo Lebrero, Gia Sandri, Luciano Pigozzi, Paul Muller, Eduardo Fajardo, Ennio Antonelli, Luis Barboo, Alfio Caltabiano, Mimmo Poli, Romano Puppo
Argumento
En los Estados Unidos de la Ley Seca, Grim Doel, deliberadamente se hace encarcelar para ayudar a fugarse a cuatro detenidos: El Irlandés, el Manco, Jeremías y el Ingeniero y los lleva a la sede de su organización que trafica con alcohol ilegal.
Por cinco mil dólares cada uno, los cuatro aceptan ponerse a las órdenes de Doel, para destruir la destilería de una banda rival, la de Sir Louis Baimont, situada en un antiguo monasterio de la Isla Gaviota.
Una de aquellas olvidadas y fácilmente olvidables coproducciones entre Italia y España, apoyada por el buen hacer del gran G. Maessso.
Comienza bien y hasta la mitad es entretenida, luego se vuelve predecible y repetitiva.
Lo mejor, y no es cachondeo, es el acabado del excelente doblaje, con aquellas maravillosas voces que encarnaban a, por ejemplo, Robert Mitchum y similares.
Por lo demás, acción a lo tonto, golpes y una pegadiza y muy repetitiva música a cargo de Riz Ortolani, habitual en el cine italiano de la época.
Hoy en día prácticamente nadie se acuerda de estas peliculillas y no es difícil explicarse el porqué una vez vistas. De todas formas, siempre es agradable ver en pantalla a intérpretes patrios como José Suárez, siempre estimable, Eduardo Fajardo o el bueno de Tito García, amén de mi idolatrado Nello Pazzafini y/o Paul Muller.
Por lo demás, poca cosa, aunque se ve el esfuerzo por lograr una ambientación correcta de la época en la sucede la acción.
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